El titular de la Asociación de Clínicas y Sanatorios advirtió del descalce que le genera los fuertes aumentos de insumos con los aranceles pisados y las menores prestaciones.
El presidente de la Asociación de Clínicas y Sanatorios de Rosario, Roberto Villavicencio, advirtió este lunes que el Covid también está causando «un desastre» en las finanzas de la medicina privada.
«Desde el punto de vista financieros, las enfermedades que estamos atendiendo son las más graves, tanto Covid como no Covid. Y es por eso que el dinero no alcanza para ningún tipo de servicio de financiamiento de la salud, desde las prepagas a las obras sociales sindicales o estatales«, señaló en diálogo con Radiópolis.
«El panorama es de terror. A los prestadores nos permitieron un aumento de aranceles el año pasado del 10% y en lo que va del año otro del 13.5%. Pero por el lado de los costos, los insumos nos subieron una media del 300/350 por ciento con productos que llegaron a subir hasta un 1.300%«, advirtió Villavicencio.
Para el representante de los sanatorios, el descalce se produce producto de la convivencia de un sistema de precios regulados (el que cobran prestadores y financiadores) y otro liberado (que es el de los proveedores de bienes y servicios para la atención médica).
«La cantidad de dinero que está desembolsando la salud privada es exhorbitante y no lo teníamos ni remotamente proyectado. Por eso digo que la situación es desastrosa», alertó.
Un caso concreto de costos que no desaceleran lo expuso Villavicencio como titular del Grupo Oroño, uno de los principales prestadores de salud privada del interior del país. «Los alquileres se fueron por las nubes. Nosotros tenemos varios inmuebles alquilado y, por otras cuestiones del mercado inmobiliario ajenas a la salud, nos están subiendo tanto los precios que salimos a buscar propiedades para comprar y reconstruir», relató.
Al igual que la atención pública, el sistema de salud privado tuvo que hacer fuertes desembolsos para hacer frente a la pandemia, tanto en infraestructura como en recursos humanos. Por ejemplo debió afronta. la readecuación de las instalaciones edilicias en los sanatorios para la atención exclusiva de los pacientes con coronavirus. Y al mismo tiempo que desde abril pasado las camas criticas son más utilizadas por infectados de Covid, los sanatorios redujeron al máximo las prestaciones menos costosas que les significan mejore ingresos y por eso hoy todo los balances de las empresas tiene serios descalces.
Y todo ese esfuerzo financiero del sector privado no se compensa con el volumen de la asistencia estatal, máxime en un contexto de devaluación y fuerte suba de insumos dolarizados. «Todo el sistema cruje. Los prestadores pueden acceder a la asistencia estatal que significa el Repro, pero -hay que aclararlo- acceder a ese programa también es una quimera», resalta el titular de la Asociación de Clínicas y Sanatorios.
inalmente, el profesional resaltó en el diálogo con el periodista Roberto Caferra fue que los prestadores también se convirtieron en un gran financiador del sistema de salud. «Por ejemplo, nosotros entregamos todos los elementos de protección para el personal y los pacientes que recién, bastante después, nos lo pagan a nosotros», dijo.
FUENTE: ROSARIO 3