El sentido homenaje de Juan Carlos Pallarols al Instituto Alexander Fleming

En un emotivo gesto, el reconocido orfebre entregó una de sus reconocidas obras a la institución. De esta manera cumplió el último deseo de una amiga, quien quiso agradecer al equipo médico que la acompañó en su batalla contra el cáncer

El célebre orfebre Juan Carlos Pallarols donó una Rosa de la Paz al Instituto Alexander Fleming. El gran gesto formó parte de un homenaje hacia su amiga Marina, y significó un agradecimiento a los médicos que la acompañaron.

La obra fue pedida por su amiga, quien al transitar las instancias finales de cáncer de pulmón de células pequeñas le preguntó: “¿Me regalás una Rosa de la Paz?”. El motivo detrás del sorpresivo encargo fue el de expresar su gratitud hacia el equipo médico que la acompañó mientras cursó uno de los subtipos más agresivos de la enfermedad que se caracteriza por su rápida extensión.

La historia entre Pallarols y Marina comenzó debido al arte y a la creatividad que compartieron. La mujer convocó al artesano para que realizara coronas para reinas de belleza, y luego ambos continuaron en contacto. La segunda vez que trabajaron juntos fue cuando, desde Disney, lo llamaron para que elaborara los zapatos de cristal Cenicienta.

“Apelé a su creatividad y ese segundo trabajo me hizo conocerla más. Ahí comenzó una amistad de muchos años, ella venía al taller porque quería cincelar. Su vocación era hacer joyas y aprendió bastante. Entre mates y charlas, surgió una amistad hermosísima de la que no he de olvidarme nunca”, relató Pallarols.

El artista realizó múltiples obras de artesanía como los bastones de mando de los presidentes argentinos desde 1983 y el cáliz del Papa Francisco.

Ahora una rosa dorada creada por el escultor decora el hall de ingreso de la institución médica, y sobresale como un símbolo de fortaleza para los pacientes que se encuentran en tratamiento por distintos tipos de tumores.

El hermano mayor de Marina, Lucas, resaltó que su hermana fue un ejemplo en este sentido, ya que nunca bajó los brazos: “Hasta el último día estuvo consciente. Estaba pagando impuestos de la casa a las ocho de la noche. Se fue a dormir y no se levantó más. Ella tuvo una esperanza de vida hasta el último día”.

Marina se involucró en la elaboración de las reconocidas “Rosas de la Paz” de Pallarols luego de realizar visitas recurrentes y pasar mucho tiempo en el taller del orfebre. La primera de estas flores fue realizada por el artesano con balas que habían sido utilizadas en la guerra de Malvinas, para honrar a los soldados. Luego replicó las mismas obras con material bélico de otros conflictos que suceden alrededor del mundo, como el de Afganistán. El objetivo de estas creaciones es el de concientizar a la sociedad sobre la destrucción y el daño que conllevan estos enfrentamientos militares.

“Actualmente, hago dos o tres Rosas de la Paz por mes. Y ella me acompañó en muchas. El día 2 de julio pasado fue que me pidió que le regalara una para donarla al Fleming. Cuando le pregunté qué le quería poner, me dijo: ‘Con todo mi agradecimiento’”, recordó Pallarols.

La entrega de la rosa fue un momento emotivo compartido por el artesano y el doctor Federico Coló, director médico del IAF, quien luego se la mostró a Marina.

Luego del acto durante el cual se reveló la obra en el IAF, y del que formaron parte familiares de Marina, el artista realizó una reflexión sobre el momento en el que su amiga se enteró de que su condición era terminal:“No sé qué me va a pasar si a mí me dicen que me voy a morir en 30 o 60 días. Ella lloró mucho, pero se preparó para morir bien. Sabía cuál era su final, pero siempre lo último que hablábamos era qué íbamos a hacer al día siguiente. Siempre tenía un proyecto de mañana. Y yo creo que lo que aprendió Marina de lo que transmitieron acá fue esa fortaleza y tal vez la rosa acá sea una contradicción. Porque lo que nos fortalecieron acá, a Marina y a mí, fue el corazón”.

La doctora Carmen Pupareli (MN 101212), médica oncóloga del IAF, quien formó parte del equipo que acompañó a la paciente, se expresó con respecto al sentimental homenaje: “La Rosa de la Paz es una obra de arte hermosa que embellece nuestro lugar de trabajo. En lo personal, me recordara siempre a una persona muy especial a quien acompañe en este camino”.

Lucas destacó que la donación de la Rosa de la Paz por parte de Marina como muestra de agradecimiento se debió a que “estuvo acompañada y se sintió cómoda, a pesar de todos sus males”. Y agregó: “Me gustaría que recuerden a Marina como alguien feliz. No tuvo una vida fácil, nuestra mamá murió cuando éramos chiquitos, después vinieron problemas económicos, y Marina siempre tuvo que pelearla. Pero salió adelante, siempre estaba haciendo cosas que le gustaban. Luchó siempre, fue aguerrida”.

Finalmente, realizó una conclusión con respecto a la difícil situación que atravesó su hermana: “Yo no sé cómo hubiera reaccionado si a un amigo mío le pasaba lo que le pasó a Marina, porque uno está todo el día con sus propios problemas. Sin embargo, ella tuvo todos los días, hasta la última internación en la que falleció, amigos que estuvieron acompañándola media hora, una hora. Ahí me dije: ‘si a algún amigo mío le pasa algo, yo tengo que estar como estuvo esta gente con Marina’. No sé si lo hubiera hecho, esto me hizo dar cuenta. Marina me dejó esta última enseñanza”.

Cómo es el cáncer de pulmón de células pequeñas

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “el cáncer de pulmón es la causa principal de muertes relacionadas con el cáncer en todo el mundo”. Desde el IAF explican que 8.600 personas fallecen por año en la Argentina debido a esta enfermedad.

El subtipo del cual padeció Marina es agresivo, de rápido crecimiento y representa cerca del 20% de los tumores de pulmón. “Se origina cuando las células normales de pulmón sufren una transformación maligna. Eso lleva a un crecimiento de las células sin control. Específicamente, este caso se trató de un cáncer de pulmón de células pequeñas (SCLC por sus siglas en inglés) que es un tipo de cáncer de pulmón, entre otros. Se caracteriza por su rápido crecimiento y su asociación con el consumo de tabaco”, explicó Pupareli.

“Al momento del diagnóstico, la enfermedad puede presentarse confinada al tórax o extendida más allá del tórax (la mayoría de los casos). Este caso tenía algunas particularidades por tratarse de una paciente joven, con escaso consumo de tabaco y presentarse con enfermedad confinada al tórax. Recibió el tratamiento estándar que consistió en quimioterapia y radioterapia y, luego, tuvo la oportunidad de participar en un ensayo clínico cuyos resultados fueron positivos”, añadió la experta.

El estudio, que se presentó en el congreso de la Sociedad Americana de Oncología (ASCO), consistió en la administración de inmunoterapia luego de la quimio-radioterapia. Los pacientes mostraron beneficios en el período de tiempo que el tumor tardó en volver a crecer. Es un avance prometedor, según los expertos del IAF, pero este tratamiento todavía no se encuentra aprobado para uso masivo.

A su vez, desde la institución médica remarcan que la prevención es esencial, ya que el cáncer de pulmón tiene una clara asociación al consumo de tabaco. Al no fumar se reducen significativamente las posibilidades desarrollar tumores pulmonares. Es primordial realizar acciones para prevenir el inicio de esta actividad nociva, especialmente en los adolescentes.

“Los tabaquistas deberían tener una consulta con su médico de cabecera para conversar si corresponde realizar una tomografía para el diagnóstico precoz de la enfermedad. Por otro lado, deberían intentar dejar de fumar. Hay pacientes que pueden lograrlo por sus propios medios y otras que necesitan ayuda. Existen médicos especializados que pueden ayudarlo”, concluyó Pupareli.

Fuente: Infobae

<< VOLVER